Vida cotidiana

Suena el despertador, son las 7. Al día siguiente vuelve hacer lo mismo, así hasta el viernes. Cuando es fin de semana y piensas ¡o si babe! ¡Podré dormir! Tu cuerpo te despierta a las 9. Intentas volverte a dormir pero no puedes…estas educando tu cuerpo en la vida adulta…tras 24 años (a fecha de hoy).

Cojo el coche, deprisa y corriendo ¡¡que put... hoy hay hielo y no encuentro el limpia cristales!! Salgo de la ciudad y me adentro por las carreteras de Aquitania. Curvas y más curvas, de la cuarta a la tercera y en primera cuando esta el ‘llaura’ con el tractor. Dejas la carretera principal entras en caminos rurales. No hay nadie. Tú, la carretera y el bosque. Eres Carlos Sanz. Le has cogido el gustillo a la velocidad. Vuelves del trabajo, entras en la ciudad, apuras un semáforo en ámbar y de repente…luces blancas ¿será una llamada de lo Alto?. Pero no, es Hacienda quien te llama. Estés donde estés.

Llega la noche: ¿pasta o arroz? ¿Longanizas o varillitas del capitán Pescanova?. Mi compañero de piso rompe la monotonía ¡¡va hacer una barbacoa porque ha aprobado el examen de moto!! Eso sí, a las 10 todos a la cama. Ha sobrado el 80% de la botella de Malibu. En mi primer Erasmus aprendí a cocinar, en mi segundo Erasmus a hacer un buen uso de la fiambrera.

Pero hay días que me voy a un restaurante a comer. ¿El menú? Inamovible. Mi porción de cerdo, con patatas, mucho aceite, mi botella de vino rojo, mucho pan y un café. Son 10€, no está mal. Repetiré. Espero no haber levantado sospechas en el bar. No quiero salir en la TV como presunto miembro de ETA. Al fin y al cabo ¿qué hace un joven español perdido en los bosques del sur de Francia, comiendo solo en una comuna francesa y con un coche alquilado?

Vuelvo al trabajo. Lagos, ríos rodean la carretera. Hace 20C, el sol aprieta y pienso ‘¿Qué no me bañaré un día de estos en pelota picá?’. Pero no, el lago siguiente tiene la respuesta. Eso ya lo pensaron antes las cabras, vacas y demás animales que habitan estas tierras.



Llega el fin de semana. Toca mover el esqueleto, despejarse un poco y como no podía ser de otra forma, tras dos cubatas; “Vous connaisez la danse des marches?”.

¡¿Qué haces en Francia?!

Oye, ¿y tú a que vas a Francia? Pero…exactamente ¿qué vas hacer? Me preguntaban mis amigos de Valencia. También mi compañero de piso, hasta tres veces, ¿qué haces en Perigueux? ¿Pero trabajas, estudias…? ¿y por qué Perigueux?. Pues bien, este es el post de la verdad: qué estoy haciendo en Francia!

Ante estas preguntas yo intentaba responder con evasivas, bueno…pues…veras…tengo tres posibilidades…me han dicho…ya veremos…¡¡que angustia!! El tema radica en que este es el primer año del programa Erasmus para emprendedores (es lo malo de inaugurar Erasmus) y en teoría es un programa para hacer contactos, conocer nuevos mercados o aprender de la experiencia empresarial del tutor.

Pero claro, esto suena bien…¡¡pero todos hemos sido becarios!! De ahí a la realidad puede haber un abismo. Por tanto, me preguntaba ¿seré el chico del café del campo rural francés? ¿Estaré, como marco, en un pueblo muy lejano, allá por las montañas, sin saber qué hacer?

La pasada semana he podido comprobar ‘in situ’ para que me ha servido o me servirá la beca. El Instituto Europeo organizó la semana pasada una Visita de Estudios con ponentes de seis países europeos para hablar de los problemas del emprendedurismo en las áreas rurales de Europa y Turquía. Estos ponentes representaban universidades, gobiernos y entidades privadas y públicas.

Viendo tal oportunidad me preparé unos catálogos en inglés de DISSERTAS por si surgía la ocasión de hacer networking. ¡y surgió! A veces la tecnología brinda momentos mágicos. El proyector no funcionaba y mientras lo reparaban el tutor me pidió que hablara del programa Erasmus…cosa que aproveche para hablar de DISSERTAS en un inglés limitado pero suficiente para ser entendido. DISSERTAS acababa de salir de Valencia y se estrenaba en Europa…buen comienzo!

Otro día tuvimos una reunión con el responsable de iniciativas empresariales de la Universidad de Limoges y al acabar la sesión me acerque a él, y a lo ‘bajini’, como a mí me gusta, volví hacer networking ‘oye, pues mira…’. También hice lo mismo con la responsable de asuntos europeos de la región de Limoges. Me duele decir esto…pero ¡¡ojala ganen los socialistas y se mantenga en el cargo!!

En conclusión, la primera semana de trabajo ha sido inmejorable. Espero que todas las semanas sean igual de fructuosas como la que he vivido en Limoges. Hoy estoy tranquilo, se están cumpliendo los objetivos de la beca.

Mi primera experiencia 'Couch'

Retomo el blog para contaros un poco qué tal me están llendo las cosas por Francia. Como sabéis, soy de los pocos que hay en el mundo que ha sido Erasmus ¡¡dos veces!!. Este año participo en la I edición del programa ‘Erasmus para emprendedores’ y espero seguir inaugurando Erasmus. Ya he solicitado el Erasmus para padres, el Erasmus para jubilados y el Erasmus para opositores (por si las moscas).


Ahora estoy en la ciudad de Perigueux (Perigó en español) que es la capital del departamento de Dordoña. Dordoña a su vez está en la región de Aquitania cuya capital es Burdeos. El Instituto está en una comuna francesa que se llama Cendrieux (Cendrió para los amigos.)

El lunes pasado cogí el tren nocturno desde Barcelona. En el tren compartí habitación con un japonés de Osaka. Las conversaciones no fueron muy profundas (él apenas hablaba inglés) pero lo suficientes para caernos bien, así que nos intercambiamos los emails ¡¡mi primer amigo japonés!!

Después de mi experiencia en Limoges en hostales seudoanormales decidí probar una experiencia nueva…varias personas me habían hablado de una red social de ‘viajeros’ que se llama Couchsurfing. En esta red hay millones de personas que ceden su casa para que otros puedan pasar uno o varios días en la casa.

Así que me abrí una cuenta y empecé a enviar emails a toda la gente de Perigueux…muchos me contestaron y se han ofrecido a enseñarme francés, a enseñarme la ciudad. A sido tal el éxito que de momento he salido todas las noches!! Un Erasmus de verdad!! Aquí tengo que agradecer a Alex todo lo que ha hecho por mí, que ha sido todo.

En el piso somos cuatro personas, dos chicos y dos chicas. Las chicas estudian enfermería en el hospital del departamento y los dos chicos marketing. La casa es genial, tres pisos, cocina, sala y mi habitación con un aseo privado…por 260€ todo incluido! A 5 min. de todo! Ya enseñare fotos…

Claro…conseguir este chollo tuvo sus sacrificios. Tuve que ir a buscar a la propietaria a su casa, en una comuna perdida de Dordoña entre bosques, pastos y caminos rurales. Entre el GPS ‘ahora gire a la izquierda’ ‘curva pronunciada’ y la señora de 84 años gritándome en francés (‘la, la, la’!!!) y seudoinglés casi tengo un accidente…¡qué estrés! Ahora también quiere alquilarme su coche…pero ya no quiero más aventuras, me quedo con mi Fiat Panda del renting car!

En definitiva, como si los años no hubieran pasado, allí estaba yo, en la cocina, intentándome comunicarme con la compañera de piso: haciendo gestos raros, diciendo palabras inexistentes, soportando miradas incrédulas…como aquel mes de octubre en Nottingham... y todo esto para saber cómo encender el horno!

Este fin de semana me quedo solo en la casa y Marie (mi compañera de piso) me ha dejado una nota “si tu as un problem ce weekend tu peux téléphoner”. ¿No es un sol?